Mi experiencia en el Colegio Cerro de Reyes
En la primera evaluación estuve en el Colegio Cerro de Reyes con mi compañera Lola para realizar "unas miniprácticas" que consistían en realizar unos grupos interactivos en los que reforzábamos con los niños ( en nuestro caso de primero de infantil ) lo que habían estado dando a lo largo de la semana; como por ejemplo:
-Los números a través de repasarlo primero con el dedo y después pintarlos con pintura o realizar lo mismo que hemos hecho con el dedo pero moviendo un coche, ponemos salida en la parte de arriba del número y llegada al final, haciendo repetirlo varias veces para que se le quede.
-Los animales a través de una serie de puzles en los cuales tenían que relacionar el nombre del animal con su foto.
-Las partes de la casa, los objetos de la clase, las partes del cuerpo... a través de unos encajables en los cuales se sacaban las piezas y ellos tenían que introducirlas donde fuera su sitio.
-Los colores a través de coches, hacer un collar, pintar un círculo con el color que se diga,a través de enseñarle tarjetas que digan que color es y viceversa que le digas rojo y el te señale algo rojo.
Los niños eran muy simpáticos y cariñosos. En mi caso la mayoría me hacían gestos para que les sacase la lengua, les persiguiera, les hiciera cosquillas...
Un día salimos al patio con ellos, vimos como unos niños de 5 años se metían con otro por tener un bulto cerca del ojo, les reñías y los niños pasaban de ti y se empezaban a burlar de ti. Uno de ellos decía que su padre no tenía miedo a la policía sino que al revés era la policía la que le tenía miedo a él. Uno de esos niños de 5 años y recalco lo de 5 años, le dijo a mi compañera que por ser mujer no se iba a librar de que le pegara. Nos quedamos los dos alucinando de todo lo que habíamos visto y escuchado allí. Esto nos sirvió para conocer otra parte de la realidad que existe y el pensamiento que tienen algunos niños que viven allí inculcados por sus padres.
No me arrepiento de haber ido al Colegio del Cerro de Reyes ya que me lo he pasado muy bien, he adquirido nuevos conocimientos y además técnicas e ideas que podré emplear en un futuro cuando este trabajando de TEI.
Me ha dado pena no poder ir este segundo trimestre de nuevo ya que nos turnamos cada trimestre va una mitad de la clase. Espero que cuando se sortee el volver a ir al Cerro me toque y pueda volver a estar con mis peques Izan, Raúl, Jorge, Isabel Larisa y Neztalí; ya que hecho mucho de menos los momentos que pasaba con ellos y lo bien que nos lo pasábamos.
-Los números a través de repasarlo primero con el dedo y después pintarlos con pintura o realizar lo mismo que hemos hecho con el dedo pero moviendo un coche, ponemos salida en la parte de arriba del número y llegada al final, haciendo repetirlo varias veces para que se le quede.
-Los animales a través de una serie de puzles en los cuales tenían que relacionar el nombre del animal con su foto.
-Las partes de la casa, los objetos de la clase, las partes del cuerpo... a través de unos encajables en los cuales se sacaban las piezas y ellos tenían que introducirlas donde fuera su sitio.
-Los colores a través de coches, hacer un collar, pintar un círculo con el color que se diga,a través de enseñarle tarjetas que digan que color es y viceversa que le digas rojo y el te señale algo rojo.
Los niños eran muy simpáticos y cariñosos. En mi caso la mayoría me hacían gestos para que les sacase la lengua, les persiguiera, les hiciera cosquillas...
Un día salimos al patio con ellos, vimos como unos niños de 5 años se metían con otro por tener un bulto cerca del ojo, les reñías y los niños pasaban de ti y se empezaban a burlar de ti. Uno de ellos decía que su padre no tenía miedo a la policía sino que al revés era la policía la que le tenía miedo a él. Uno de esos niños de 5 años y recalco lo de 5 años, le dijo a mi compañera que por ser mujer no se iba a librar de que le pegara. Nos quedamos los dos alucinando de todo lo que habíamos visto y escuchado allí. Esto nos sirvió para conocer otra parte de la realidad que existe y el pensamiento que tienen algunos niños que viven allí inculcados por sus padres.
No me arrepiento de haber ido al Colegio del Cerro de Reyes ya que me lo he pasado muy bien, he adquirido nuevos conocimientos y además técnicas e ideas que podré emplear en un futuro cuando este trabajando de TEI.
Me ha dado pena no poder ir este segundo trimestre de nuevo ya que nos turnamos cada trimestre va una mitad de la clase. Espero que cuando se sortee el volver a ir al Cerro me toque y pueda volver a estar con mis peques Izan, Raúl, Jorge, Isabel Larisa y Neztalí; ya que hecho mucho de menos los momentos que pasaba con ellos y lo bien que nos lo pasábamos.
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